El Palacio de Congresos El Batel, inaugurado el 15 de marzo de 2012, ha sido reconocido en numerosas ocasiones con diferentes premios de arquitectura tales como la XII Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo en 2013 por su revolucionario diseño.

Su ubicación junto al puerto y el mar marca su diseño, que destaca por las líneas rectas, similar a los contenedores de los barcos apilados en el muelle, a la rectitud del cantil del puerto y a la calma del mar que le rodea. Los policarbonatos traslúcidos utilizados para la construcción de la fachada, de fabricación autóctona, son usados por primera vez para tal fin, creando espacios luminosos que le aportan al interior una gran ligereza.

Su compleja estructura, caracterizada por la ausencia de pilares, crea un interior de grandes espacios diáfanos y un efecto liviano, que recuerda la ingravidez del fondo del mar. Este ligero interior se comunica entre sí mediante un paseo de suaves rampas que permite el recorrido por el edificio.